CRÓNICA DEL XXXIV SYMPOSIUM DE LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE HISTORIA DE LA PSICOLOGÍA
Madrid, 20-22 de abril de 2022

CRÓNICA DEL XXXIV SYMPOSIUM DE LA SOCIEDAD ESPAÑOLA DE HISTORIA DE LA PSICOLOGÍA (Madrid, 20-22 de abril de 2022)

Mara Ballester (1), María Montagud (1), Jorge Laguna (2)
(1) Universidad de Valencia
(2) Universidad Nacional de Educación a Distancia

La Sociedad Española de Historia de la Psicología se reunió por trigésimo cuarta vez, en esta ocasión en la sede del Centro de Enseñanza Superior Cardenal Cisneros, adscrito a la Universidad Complutense de Madrid. A diferencia del Symposium del año pasado, este año se realizó de forma presencial, dando la bienvenida a una “normalidad” muy deseada y que muchos de los presentes agradecieron -respetándose, claro está, las medidas sanitarias en todo momento, ya se podía ver la luz al final del túnel.

En el acto de inauguración, dieron la bienvenida a los asistentes el Director del Centro de Enseñanza Superior Cardenal Cisneros, Raúl Canosa, la Decana de la Facultad de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid, Nieves Rojo, el Vocal de la Junta de Gobierno del Consejo General de la Psicología de España, Manuel Berdullas, quien resaltó el importante papel de la Historia de la Psicología para la construcción de la identidad de disciplinas y la prevención de su fragmentación, y, finalmente, el Presidente de la Sociedad Española de Historia de la Psicología, Gabriel Ruiz.

La conferencia de apertura fue impartida por la profesora Ana Maria Jacó-Vilela, de la Universidad del Estado de Río de Janeiro, cuya investigación está enfocada en la perspectiva histórica de la circulación del conocimiento, en este caso en torno a la figura de Emilio Mira y López y su peso en la psicología latinoamericana, recalcando sus ideas acerca de la unidad funcional psicosomática del ser humano y el papel de la psicometría, así como las fuertes influencias sociales y políticas que tuvieron sus trabajos.

Por otro lado, en la primera mesa del miércoles 20 de abril se presentaron tres ponencias enfocadas en la Historia de la Psicología en España hasta la Guerra Civil. Francisco J. Bandrés y Rafael Llavona nos presentaron en su comunicación el programa con el que Luis Simarro concurrió a los ejercicios de la oposición de la cátedra de Psicología Experimental de la Universidad Central de Madrid que ganó en 1902. El estudio del temario sugiere el interés personal de Simarro por los aspectos históricos y teóricos de la Psicología, siempre dentro de la línea marcada por los textos normativos de Wundt. Annette C. Mülberger presentó algunos escritos de Concepción Arenal que, en su tiempo, fueron interpretados como psicológicos y mostró cómo esta autora criticó el método de estudio del delincuente defendido por los antropólogos italianos. Helio Carpintero describió un proyecto poco conocido de Emilio Mira y López, centrado en conocer las competencias y habilidades de los jóvenes de cara a su orientación vocacional y profesional, así como en la importancia de fomentar sus habilidades sociales desde la escuela.

La segunda mesa introdujo tres ponencias englobadas en la Historia de la Psicología en España tras la Guerra Civil. María José Monteagudo y Carmen García mostraron importantes figuras femeninas dentro del ámbito de la psicología educacional y cómo sus aportaciones fueron claves en el desarrollo de la psicología educacional. Julia Álvarez-Arenas y Ana Conseglieri nos introdujeron la figura de Jesusa Pertejo, cuyas contribuciones más destacadas se dieron en el ámbito de la psicología infantil, social y clínica. José María Gondra nos mostró la vida y trayectoria profesional de José Antonio de Laburu, sacerdote jesuita que en los años cuarenta del s. XX desarrolló una importante labor de divulgación de una psicología científica inspirada fundamentalmente en la escuela de Würzburgo y la psicología individual de Adler.

En la tercera mesa se englobaron las comunicaciones relativas a la historia y los sistemas psicológicos de la primera mitad del s. XX. Gabriel Ruiz y Natividad Sánchez exploraron el uso del concepto de reflejo condicional entre los intelectuales británicos de entreguerras ligados al socialismo y los medios de comunicación estadounidenses del periodo macarthista. René van Hezewijk, por su parte, nos mostró la perspectiva de la psicología de la Gestalt de Karl Bühler, yendo más allá de la suma de las psicologías de la Gestalt. Rinske Vermeik comentó las técnicas de los test educacionales introducidos en los Países Bajos por diversos autores, como Heymans. Noemí Pizarroso mostró como Henri Wallon e Ignace Meyerson forjaron una amistad marcada por diferentes caminos, uno enfocado en la infancia y el otro en la perspectiva genética-cultural.

La cuarta mesa, moderada por Fernando Gabucio, dio paso a trabajos enfocados en la teoría y prácticas psi en los límites de la vida. Beatriz Corbí y Fátima Maestú introdujeron la importancia del acompañamiento psicológico durante el periodo perinatal y presentaron un estudio de su desarrollo histórico en España. Cristina Florea expuso su investigación sobre el papel de la psicología en el desarrollo del Programa de Prevención de Suicidios y su papel en las instituciones penitenciarias. Miguel Ángel Estévez ofreció una representación gráfica de las tasas de suicidio en el periodo de la pandemia para proponer la hipótesis de que el concepto durkheimiano de anomia permite entender la evolución de dichos datos.

El segundo día empezó con dos mesas dedicadas al análisis de la construcción de la subjetividad y el conocimiento psicológico en distintos momentos históricos. La primera mesa se centró en el Siglo de Oro español, y comenzó con una exposición de Luis Martínez en torno al Diario espiritual de Ignacio de Loyola y el papel desempeñado por las referencias al llanto en la construcción de la subjetividad en el catolicismo. Teresa Sánchez, por otro lado, expuso a través del primer diccionario español, el Tesoro de Covarrubias, cómo se entendían las emociones cotidianas y las emociones morales en la época, así como ciertas interpretaciones de la psicopatología. Seguidamente, Fernando Gabucio desarrolló un paralelismo entre la moderna literatura de autoayuda y El arte de la prudencia de Baltasar Gracián, lo que explica que este se convirtiera en un éxito de ventas en pleno siglo XX, pese a ser del año 1647. Finalizó la mesa pasando de la literatura a la pintura, con la ponencia de Florentino Blanco acerca de las imágenes devocionales propias de los oratorios y cómo a través de los textos del Concilio de Trento se determinaron sus características.

La segunda mesa se centró en la construcción del conocimiento psicológico y la concepción de lo humano en el marco de la Ilustración y Contrailustración. En primer lugar, Rubén Gómez analizó los trabajos de Edward Tyson sobre la comparativa del orangután con el humano y su impacto a diferentes niveles. Francisco Pérez y Francisco López, a continuación, estudiaron cómo se trató de dar una explicación al asunto de la plaga vampírica del s. XIX, tanto desde el punto de vista clínico como social. Para cerrar la mesa, Juan Hermoso se centró en la metáfora de la mente como un espejo viviente presentada por el sacerdote católico Dalgairns en el seno de los debates de la Sociedad Metafísica de Londres, y su posible papel en la retórica acerca de lo mental esgrimida por Thomas H. Huxley.

Para finalizar la mañana del jueves se procedió a la presentación de cinco investigaciones mediante sendos pósteres, que se instalaron en la entrada de la sede y quedaron expuestos hasta el fin del Symposium. La sesión comenzó con el trabajo de Mara Ballester, que recuperaba los nombres y la trayectoria vital de las ocho mujeres que formaron parte de la fotografía del Congreso Psicoanalítico de Weimar en 1911. Ana Fernández presentó parte de su tesis doctoral, centrada en la figura de María Zambrano, estudiando en particular la concepción del maestro desplegada por la filósofa y su relación con su propio maestro, Ortega y Gasset. El trabajo de Raúl Martínez se centró en la relación entre la enfermería y el análisis de las relaciones de poder propio del pensamiento de Foucault. Por su parte, Miguel Huertas nos presentó la revista Clínica y Análisis Grupal como una fuente crucial que nos aproxima al estudio de la corriente psicoanalítica y sus relaciones con el pensamiento marxista. Concluyó la sesión de pósteres con un trabajo conjunto por parte de Carmen Hurtado, Lourdes Luceño, Jesús Martin y María del Mar Novillo sobre la ansiedad y su evaluación.

La sesión de la tarde estuvo dedicada al debate acerca del lugar de la psicología en las controversias entre ciencia y pseudociencia. José Carlos Loredo realizó un análisis del libro Ciencia y pseudociencia en psicología y psiquiatría, de Marino Pérez, al que siguió la ponencia del propio Marino Pérez en torno a la posición inestable que ocupa la psicología entre el cientifismo y la pseudociencia. Por último, Iñigo Ongay disertó acerca de la importancia de buscar la racionalidad, pese a que pueda sonar paradójico, en los delirios con que cursan una multiplicidad de trastornos.

La jornada de trabajo se cerró con la conferencia plenaria del profesor Santo di Nuovo, de la Universidad de Catania, acerca de la historia de la instrumentación psicológica y los pruebas psicométricas y las distintas concepciones de su fiabilidad y validez.

El último día del Symposium comenzó con la entrega del premio Antonio Caparrós 2022 al trabajo de María Montagud titulado Ser mujer y pionera en Japón: las primeras psicólogas japonesas. La exposición reflejó el contexto social, religioso y cultural en el que se encontraban esas primeras psicólogas japonesas y el desarrollo de sus trabajos bajo la influencia de la psicología occidental. Tras la sesión de presentación de libros, en la que participaron mediante videoconferencia los profesores Ángel Cagigas, Jimena Carrasco, Jorge Chávez, Arthur Leal e Iván Sánchez, además de Florentino Blanco y José Carlos Loredo, comenzó la primera mesa del día, que abordó el tema de la didáctica e investigación de las disciplinas psi. La ponencia presentada por Mónica Balltondre y Silvia Lévy nos dio la oportunidad de conocer su proyecto de inclusión del género en la formación del alumnado en el ámbito de la salud a través de la elaboración de cortometrajes. Por otro lado, Fernando Ferrari presentó una nueva visión de las metodologías cualitativas y cuantitativas de análisis de historias clínicas incorporando tecnologías informáticas. Por último, Vicente Caballero hizo énfasis en la importancia de introducir de manera adecuada la Historia de la Psicología a los estudiantes de Filosofía, tomando como ejemplo las relaciones entre las figuras de Skinner y Quine.

La última sesión de ponencias agrupaba aquellas que pretendían problematizar algunos conceptos propios del discurso psicológico. Carlos de Aldama planteó un recorrido histórico por las diferentes formas de concebir la mente que se han venido dando en los diferentes paradigmas psicológicos, y que culminó con el concepto de “mente extendida” como aquél que, a juicio del ponente, resultaba el más completo de todos. Jorge Laguna trató de poner en relación las transformaciones que en el campo de la violencia efectiva ha supuesto la emergencia del terrorismo contemporáneo con el surgimiento de nuevas narrativas heroicas en autores como Tolkien y en las interpretaciones que de este tipo de narrativas se han hecho desde ciertas escuelas psicoanalíticas.

Finalmente, la conferencia de clausura, celebrada mediante videoconferencia, convocó a Roger Smith, profesor emérito de la Universidad de Lancaster, quien presentó el contexto y las conclusiones principales de su libro The sense of movement, publicado en 2019. El punto de partida del trabajo de Smith se ubica en un interés general por el tacto, entendido como sentido privilegiado en relación con su capacidad para servir de criterio, como muestra el autor a través de distintos ejemplos de la lengua inglesa, para distinguir lo que es real. El “sentido del movimiento” puede ser entendido, así, como una suerte de “tacto interno”, una facultad que nos permite construir la realidad a medida que llevamos a cabo nuestro propio movimiento. El profesor Smith mencionó a continuación algunas de las distintas fuentes históricas que serían precursoras del concepto moderno de “kinestesia”, comenzando por algunas obras de fisiología de autores como Charles Bell que, a principios del siglo XIX trataron el tema de un “sentido muscular”, y llegando hasta desarrollos de la psicología y la filosofía del siglo XX centrados en el tema de la corporalidad, para concluir centrándose en las implicaciones filosóficas del “sentido de movimiento”, que supone una alternativa a la metafísica cartesiana en tanto que distingue la realidad como “resistencia” al movimiento propio. Finalmente, nos contó Roger Smith, destacar la importancia de este sentido podría ayudarnos a entender y mejorar muchos aspectos de nuestra vida cotidiana, tales como nuestra relación con el espacio y con las tecnologías y nuestra propensión al deporte y las artes del movimiento.

Como resaltaron en el acto de clausura el Presidente de la Sociedad Española de Historia de la Psicología, Gabriel Ruiz, y el Coordinador de la División de Psicología del Centro de Enseñanza Superior Cardenal Cisneros, Juan Hermoso, encuentros como el Symposium de la Sociedad Española de Historia de la Psicología brindan una magnífica oportunidad de debate e intercambio de conocimientos y puntos de vista, y abren la puerta a nuevos desarrollos en los múltiples ámbitos en los que se desarrolla la Psicología.